
#MeditacionesDeUnConfinado en el Primero de mayo.
Cuanto más arrecie la tormenta y sintáis como truenos los latidos del miedo y del desánimo, anudaos unos a otros por los brazos, levantad la cabeza, y avanzad, avanzad, siempre avanzad, que si alguno se rinde lo llevaréis en volandas y no caeréis.
Avazad, avanzad porque os espera el arcoiris.
© José María Suárez Gallego