Los zapatos viejos siempre les sirven a los descalzos que no se calzan con la soberbia de sus errores.
Caminos nuevos con zapatos viejos, la emoción de estar comenzando siempre sin que nos acabemos en un final.
¡Es vivir juntos el mito del eterno retorno!
«Me abandonó
como se abandonan
los zapatos viejos.»
Joaquín Sabina. De la canción «19 días y 500 noches»
© José María Suárez Gallego